Imagen de Archivo. |
Con
gran asombro han amanecido los ciudadanos de Villarrobledo ante el
hallazgo que los jóvenes de la Universidad Complutense de Socuéllamos descubrieron ayer por la tarde.
Tres
jóvenes universitarios han sido los protagonistas de esta historia tan
sorprendente e intrigante que no ha dejado a nadie indiferente, así relataba
uno de ellos lo acontecido: “Nos dirigíamos
a Lezuza, al yacimiento arqueológico de
Libisosa, pero nuestra profesora de Historia del Arte nos dijo que podíamos
parar en Villarrobledo para ver la Performance de la que toda la Comunidad de
Castilla- La Mancha habla. No imaginábamos lo que iba a suceder”.
Resulta
que los tres jóvenes habían llegado a la ciudad sin las sutiles herramientas
para realizar las excavaciones en el yacimiento: “No nos dimos cuenta de que no habíamos dejado los alicates, el
rastrillo, las horcas y la zoqueta en casa. Así no podíamos trabajar, pero un
amable vecino nos ayudó”.
El hombre que ayudó a los jóvenes no ha querido revelar su identidad a Villarrobledo Today pero nos ha confirmado que: “Yo pensaba que estos tres venían pa’ el Viña Rock, con esos sombreros y ropas que llevaban, pero resulta que eran exploradores o algo así han dicho. Total que no tenían no se que herramienta y yo los he mandado a Frías porque allí ese hombre debe tener lo que buscan. Y si no lo tiene lo construye con diferentes piezas que tiene allí”.
El hombre que ayudó a los jóvenes no ha querido revelar su identidad a Villarrobledo Today pero nos ha confirmado que: “Yo pensaba que estos tres venían pa’ el Viña Rock, con esos sombreros y ropas que llevaban, pero resulta que eran exploradores o algo así han dicho. Total que no tenían no se que herramienta y yo los he mandado a Frías porque allí ese hombre debe tener lo que buscan. Y si no lo tiene lo construye con diferentes piezas que tiene allí”.
En efecto, los jóvenes aparecieron en torno a las 17:30 en la tienda donde muy amablemente le expusieron al dependiente las herramientas que necesitaban: “Realmente no entendí nada de lo que ellos me dijeron, eran cosas con nombre muy raros, así que les dije que fueran a mirar en la trastienda a ver si encontraban algo que les fuera útil ” señalaba el dependiente.
En
torno a las 20:34 llegaban nuestros protagonistas a la trastienda: “tardamos
demasiado porque tuvimos que esquivar una gran cantidad de objetos” comentaba
uno de ellos.
Fue en el suelo de la trastienda donde los jóvenes probaron la efectividad de la misma, cuando de repente sucedió lo
impensable: “¡Es increíble!, no
esperábamos encontrar nada allí, solo queríamos probar si la herramienta que
nos había realizado este señor funcionaría. Al principio empezamos a
desenterrar pilas, cables, móviles, despertadores, cartas magic, hasta que de
repente dimos con restos de unos huesos” declaraba Benavente Leackey.
Las
pruebas de carbono-14 realizadas por el instituto científico de Villarrobledo,
han revelado que los restos encontrados en la tienda corresponden efectivamente
a un homínido de más de 7 millones de años de antigüedad, además los
científicos en un alarde de profesionalidad han ampliado su tarea concluyendo que: los relojes son de sol, los ordenadores van a “pedales”, los televisores
son en blanco y negro, los precios están en maravedíes.
Ante
la gran cantidad de objetos encontraos con valor histórico, el ayuntamiento de
Villarrobledo está estudiando la posibilidad de hacer un museo en dicho
comercio.
Seguiremos
informando.
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